El acceso a productos menstruales es limitado. Y los «baños» son un agujero en la arena rodeado de sábanas, que se comparte con docenas de personas. “La dignidad se ha perdido”, afirman. Navegación de entradas “Ainda Estou Aqui”, la película que lidera la taquilla en Brasil y confronta al país con el trauma de la dictadura Celdas inhumanas, torturas, comida en mal estado: dura denuncia sobre las condiciones de los opositores presos en Venezuela